‘Dirty Dancing’ también sufre de remake

Me apuesto mi preciado cuello a que este remake que ya está desarrollando Lionsgate no llegará a la altura ni del último de los títulos de crédito de esta deliciosa y eterna cinta original ochentera que quiere versionar de Emile Ardolino, un drama musical que tenía a Patrick Swayze como estrellón, con coreografías de Kenny Ortega.

No siempre es posible tirar del recurso chupóptero de las revisiones, y en este caso ‘Dirty Dancing’ es imposible de remakear sin que salga un truñazo de tres pares de huevos. Julia Dahl (’Niñera por sorpresa’) tiene un marronazo con la redacción del nuevo guión.

Y es que atención a su ‘curriculum’: 6 millones de dólares de presupuesto y 213 millones taquilleados en todo el mundo. Banda Sonora Original superventas con dos álbumes multiplatino repletos de temazos, entre ellos el ganador del Globo de Oro y Oscar a la mejor cancionzaca en 1988 ‘(I’ve Had) The Time of My Life’.

Ya fracasó, y se veía venir, una secuela de este titulazo, llamada ‘Dirty Dancing: Havana Nights’, con Diego Luna de guaperillas bailarín, que fue distribuida precisamente por la Lionsgate en 2004, y que tuvo un resultado en taquilla para no volver a dedicarse al cine: costó 25 millones de dólares y recaudó 27 en todo el mundo.

No sé entonces cómo tienen vergüenza de volver a intentarlo, y además con un remake de un joyón intocable.